Eso, solo eso, nada más que eso. Es algo con lo que he aprendido a vivir, pero que a veces me agobia; la carga acostumbrada, pero a ratos me mata.
No quiero llorar (soy muy macho como para hacerlo), tengo que darle una vuelta en mi cabeza antes de hacer algo.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment